En apenas tres décadas, la red ha pasado de ser un experimento tecnológico a convertirse en una infraestructura esencial de la vida moderna. Internet en 2025 alberga a más de 5.500 millones de personas —casi dos tercios de la población mundial— conectadas. La red de redes se ha transformado en una extensión natural de nuestra existencia: trabajamos, compramos, estudiamos y nos entretenemos a través de ella.
Según los datos del operador global DE-CIX, el presente y el futuro inmediato de Internet están marcados por la expansión masiva de dispositivos conectados, la inteligencia artificial, la digitalización urbana y la llegada de la conectividad orbital. Estos son los 10 datos clave que definen la evolución de Internet en 2025.
Índice de contenidos
10 datos esenciales de internet en 2025
1. Dos tercios del planeta conectados a internet en 2025
El número de usuarios de Internet se ha duplicado en la última década. En 2024 eran ya más de 5.500 millones de personas, con un tiempo medio de conexión que supera las seis horas diarias. España, con un 96,4 % de penetración y más de 46 millones de usuarios, figura entre los líderes europeos en acceso y uso intensivo de la red. Internet no solo es una herramienta, sino una necesidad básica, valorada incluso por encima de otros servicios esenciales.
2. Más dispositivos que personas
Vivimos inmersos en el Internet de las Cosas (IoT). En 2025 hay más de 31.000 millones de dispositivos conectados en todo el mundo: desde relojes inteligentes hasta sensores industriales y vehículos autónomos. Cada uno de ellos genera datos que circulan por una infraestructura global que, según DE-CIX, movió más de 68 exabytes en 2024. Se estima que el total de datos creados y consumidos alcance los 182 zettabytes este año, un volumen que redefine el concepto de información.
3. Madrid, nuevo epicentro digital europeo
España ha pasado de ser un usuario avanzado a convertirse en un actor estratégico en la red global. En los últimos cinco años, Madrid ha triplicado su tráfico de datos, consolidándose como uno de los hubs de interconexión más importantes del continente, junto a Frankfurt, Ámsterdam o París. Este crecimiento refuerza el papel del país como punto clave en la economía digital europea.
4. El reinado del streaming
Más del 65 % del tráfico global de Internet se destina al consumo de vídeo en streaming. Plataformas como YouTube, Netflix o Twitch dominan el panorama digital y transforman la forma en que se consume contenido. En España, el auge del vídeo bajo demanda ha cambiado los hábitos de ocio y generado nuevas oportunidades de negocio para medios y creadores. La televisión lineal, tal y como la conocíamos, ha pasado a ser una opción más entre muchas.
5. Internet desde el espacio
Lo que hace unos años parecía ciencia ficción hoy es una realidad. Las conexiones por satélite a internet en 2025 están reduciendo la brecha digital en zonas rurales y remotas gracias a proyectos como Starlink. Incluso la Luna cuenta ya con una red móvil instalada por Nokia, que permitirá conectar vehículos y bases lunares. El espacio se convierte, así, en la nueva frontera de la conectividad.
6. Velocidades récord
La infraestructura española ha dado un salto de calidad. Las velocidades medias alcanzan los 229 Mbps en red fija y 54 Mbps en móvil, impulsando el teletrabajo, los juegos online o las videollamadas en alta definición. A nivel mundial, DE-CIX ha batido un récord de tráfico de 25 terabits por segundo, mientras que en el laboratorio, un equipo japonés ya ha alcanzado velocidades experimentales de 400 terabits por segundo. La velocidad, literalmente, no deja de crecer.
7. La inteligencia artificial revoluciona la forma de navegar a internet en 2025
Los asistentes basados en IA —como ChatGPT, Gemini o Copilot— están sustituyendo progresivamente a los buscadores tradicionales. En los países más digitalizados, el 80 % de los usuarios ya recurre a ellos para buscar información, realizar tareas o generar contenido. España sigue esta tendencia con rapidez, tanto en el ámbito doméstico como empresarial. Este cambio redefine la manera en que accedemos al conocimiento y la información.
8. Las smart cities ya son una realidad
La digitalización no se limita a los hogares o las empresas. Las ciudades inteligentes son una realidad que mejora la eficiencia urbana y la calidad de vida. En España, numerosos municipios ya aplican tecnología IoT en alumbrado, movilidad o gestión de recursos. Internet en 2025 es la red invisible que permite optimizar la energía, reducir la contaminación y anticipar necesidades ciudadanas.
9. La economía digital gana protagonismo
La conectividad también impulsa nuevos modelos económicos. La publicidad digital y las suscripciones son los pilares del negocio online. Google prevé superar los 265.000 millones de dólares en ingresos publicitarios en 2025, mientras que el auge del contenido de pago sostiene el crecimiento de medios y plataformas. En España, esta transformación está generando empleo, innovación y una nueva clase de economía basada en la atención y los datos.
10. Hacia una red híbrida y orbital
El futuro inmediato pasa por la conectividad híbrida: redes terrestres de alta capacidad combinadas con satélites de órbita baja y, próximamente, puntos de intercambio en el espacio. El proyecto Space-IX de DE-CIX busca precisamente eso: conectar directamente los satélites con la infraestructura terrestre para aumentar la velocidad, la resiliencia y la cobertura global.
Una red que lo conecta todo
Internet en 2025 ya no es un servicio, sino una infraestructura vital. Desde el entretenimiento hasta la sanidad, pasando por la movilidad o la educación, todo depende de una conectividad estable y segura. Y, mientras la inteligencia artificial, el IoT y la conectividad espacial siguen avanzando, el verdadero reto está en garantizar que esta revolución digital sea inclusiva, sostenible y accesible para todos.