¿Alguna vez ha intentado iniciar una animación desde cero sin ningún tipo de planificación? Si es así, probablemente terminó en un desastre. Cuando los animadores se hacen una idea, se sienten tentados a sumergirse y empezar a garabatear cuadro tras cuadro a mano o con software de animación. La mayoría de las veces, el proyecto termina saliéndose de los caminos trillados sin saber adónde va. Reducir la velocidad no es muy divertido, pero al final salvará sus proyectos. Intenta seguir estos cinco pasos antes de empezar tu próxima animación, y verás la diferencia que hace la preparación en tus proyectos.
Índice de contenidos
Conozca su historia
Muchas personas, especialmente principiantes, se sumergen en una animación con una idea pero sin una historia real. Mientras que cada historia comienza con un concepto, es necesario escribirlo todo para entender hacia dónde se dirige la animación. Es posible que tenga que hacer cambios de última hora en la historia cuando se encuentre con limitaciones o problemas, pero ese marco básico sigue existiendo. Escribe una narrativa o un guión, con dirección escénica, notas sobre el panorama de la cámara, zoom y ángulos. Planifique cada detalle. Necesitarás tu plan más tarde.
Conozca a sus personajes
No hagas un solo sketch rápido de tus personajes. Realice varias inyecciones faciales y no sólo una o dos. Dibújalos con todo su cuerpo desde varios ángulos. Dibújalos en reposo. Dibújalos moviéndose. Atraerlos enojados y atraerlos felices. Dibuje la forma en que sus manos se mueven mientras hablan. Dibuja los detalles más finos de sus piercings o tatuajes, o los extraños diseños de sus camisetas. Renderizarlos en color. Cree hojas de caracteres completas.
Si tienes objetos inanimados que aparecen en la escena, dibújalos también, especialmente si son objetos en movimiento como coches o naves espaciales. Esto le ayuda mucho más tarde durante el proceso de animación. La creación de hojas de caracteres le ayuda a formalizar este proceso y puede utilizarlas como referencia más adelante. Se sorprendería de lo lejos que llegan en cuanto a dar consistencia y regularidad a sus animaciones. No sólo eso, sino que también te ayudan a renderizar tus personajes en el menor número de líneas posible para eliminar el exceso de trabajo.
Planificar las escenas
A menos que estés animando un cortometraje de una escena, tendrás varias escenas diferentes en tu animación. Echa un vistazo a tu historia o guión. Marque dónde termina una escena y dónde comienza la siguiente. A continuación, siéntese e identifique los requisitos de cada escena: cuántos personajes hay en cada una, qué fondos necesita y el tipo de música o voz en off que necesita.
Cree un guión gráfico detallando la acción de la escena, la acción de la cámara, los efectos y los colores. Convierta las palabras de su historia o guión en imágenes con instrucciones claras. La creación de instrucciones visuales para usted mismo forma el marco de trabajo que le guiará a lo largo del proceso de animación.
Haga un mapa de su tiempo
La sincronización adecuada es esencial para la animación. No todo se mueve a la misma velocidad; correr la distancia X no requerirá el mismo número de fotogramas que caminar la distancia X. Si animas a un guepardo saltando pero eliges un número X de fotogramas arbitrarios para rellenar entre tus fotogramas clave, puedes dejar a tu guepardo flotando lentamente en el aire o precipitándose a velocidades mortales. No sólo eso, sino que no todo el movimiento continúa a la misma velocidad.
A veces hay una facilidad para entrar y salir, como la cuerda de un campo de béisbol. También es probable que esté trabajando con limitaciones de tiempo. ¿Cuánto tiempo quieres que dure tu animación? ¿Qué se puede recortar para que encaje en esas limitaciones de tiempo? Saber estas cosas te ayuda a crear hojas de droga para mapear los marcos que necesitas dibujar.
Crear un flujo de trabajo y un plan de proyecto
A estas alturas, probablemente ya tienes una idea clara del trabajo que necesitas hacer para tu animación. Anote esa información. Decida el orden en que completará cada etapa del proyecto y su metodología. Practica un poco de disciplina y apégate a tu plan. Establezca una línea de tiempo, especialmente si está trabajando en una fecha límite para otra persona. Calcule cuánto tiempo necesita para cada parte dentro de las expectativas realistas, y luego explique cómo va a permitir ese tiempo durante X días.
Seguir estas pautas no te hará un animador perfecto, pero te mantendrá en el camino y te ayudará a establecer un proceso de trabajo profesional.